Acaba de terminar el partido entre la
Juve y el Madrid. El fútbol ni me gusta ni me deja de gustar, me entretiene lo justo. Pero al drama nacional de la eliminación de los equipos balompédicos hispanos hay que verle el lado positivo. El mejor homenaje que se le podía hacer al manco de Lepanto en este su magno aniversario: No tener que volver a escuchar por esta temporada nuevamente al tándem intelectual perpetrado por José Angel de la Casa y Míchel Nosecuántos. Hoy se han superado a sí mismos destrozando nuestro acervo cultural común a pelotazo limpio:
"¿La pega? Sí, pero la da mal". Y así una y otra vez, durante todo el partido y la prórroga. Menos mal que no hemos llegado a los penaltis. Les prometo que he celebrado el segundo gol de los transalpinos como si lo hubiera marcado yo. Librarnos de esta pareja de ágrafos biempagados es lo mejor que nos podía pasar. Claro que ahora TVE es capaz de reciclarlos y devolverlos a la pantalla leyendo El Quijote después de los telediarios... Nunca se sabe.
P.S.: Sí, ya sé que este comentario no es de Ciencia, ni de Tecnología, ni de Política. Tendría que estar hablando del
Telescopio Espacial Hubble, por ejemplo, como hace
El Pez, escribiendo su epitafio. El del Hubble, me refiero. "
Fue bonito mientras duró", o algo así. El partido, me refiero. Casi que lo dejo.